Decepcionados de las promesas, de las reuniones y las visitas de un lado y de otro sin que se tengan soluciones, así se declaran los damnificados de la tragedia ocurrida en Mocoa, que este lunes 31 de marzo completa 8 años y aún sigue el viacrucis para cientos de familias que están esperanzadas en volver a tener una vivienda.En la tragedia, el saldo fue de 330 personas muertas, 400 heridas y alrededor de 1.500 damnificados, entre el área rural y urbana.En esa gran masa de la población, que además eran familias vulnerables, asentadas en barrios edificados en terrenos de alto riesgo, se hicie