La embestida de la industria automotriz china en el mundo y el debate sobre su fiabilidad frente a las marcas europeas, estadounidenses o japonesas está más vigente que nunca.A Colombia, por ejemplo, siguen llegando compañías de origen asiático con modelos llamativos, que buscan competirles de igual a igual a las ya tradicionales firmas del viejo continente que llevan décadas de trayectoria en el país.En España, la llegada de carros chinos no es tan fuerte como en esta parte del mundo; sin embargo, ya ha comenzado a verse un mayor movimiento de esta industria, por lo que se ha comenzado a dar el debate que comenzó hace unos años en Colombia.El mejor mecánico de España les dio la bendición a los carros chinosEn medio de esta incertidumbre que ha producido el amplio desarrollo tecnológico chino y las dudas sobre si pueden darles la pelea a los tradicionales europeos, el portal español La Vanguardia entrevistó a Carlos Pérez, el mejor mecánico de ese país, título que logró luego de haber sido proclamado como el MVP del Taller, un certamen organizado por la Comunidad del Taller e Intea Automoción.Este experto, que presta sus servicios en Valladolid, dio su veredicto sobre la fiabilidad de los autos chinos y los principales desafíos que tienen frente al resto de marcas con otros orígenes.Pérez dio su bendición a los vehículos chinos y destacó cómo han venido evolucionando con el paso de los años, alcanzando altos estándares de calidad.Sin embargo, lo que más le ha llamado la atención a este experto mecánico es la configuración que traen los autos de lujo en cuanto a calidad y tecnología, lo cual, según él, es de un nivel que no tiene nada que envidiar a los modelos occidentales.“Se ven sobre todo coches [chinos] de gama media, que van mejorando poco a poco, pero donde realmente sorprenden [estos fabricantes] es en sus modelos de alta gama, que pueden competir en calidad y tecnología con cualquier marca europea”, señaló el que es el mejor mecánico de España.Este hombre también habló sobre los retos de estas marcas emergentes y coincidió con un fenómeno que es evidente en Colombia.Pérez dijo que, aunque la fuerza de venta es poderosa, la representación y el servicio posventa puede tener algunas complicaciones por la demora en la llegada de repuestos, aumentando el tiempo de espera en los talleres.“Hay que tener en cuenta que muchos de sus repuestos vienen directamente de China y eso puede alargar los tiempos de reparación”, explicó.Este tipo de retrasos puede afectar a diferentes marcas que están recién llegadas a su país y no a las que ya cuentan con tiempo más amplio de permanencia, lo que les ha permitido afianzarse y dar una mejor garantía a sus clientes.Si bien Europa ha decidido abrirles la puerta a los vehículos chinos, las marcas de ese origen tienen un amplio camino por recorrer, el mismo que en otras latitudes, como Latinoamérica, ya transitaron y han fijado bases sólidas que terminan por traducirse en una mayor confianza para los usuarios y mejores oportunidades de negocio.
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