El papa León XIV autorizó la realización de la misa tradicional, ceremonia que el anterior pontífice, el papa Francisco, había restringido y solo se podía celebrar en el Vaticano. La misa tendrá lugar el 25 de octubre en el altar de la Basílica de San Pedro.La ceremonia será celebrada por el cardenal Raymond Leo Burke, que es ampliamente conocido por su oposición al papa Francisco. Este rito tradicional no se había permitido en los últimos tres años.