El pasado 14 de marzo, JetSmart —la aerolínea de bajo costo— cumplió un año de su operación en Colombia. Aterrizó en el país, tras el descalabro financiero de Viva Air y Ultra Air, que significó su liquidación y salida del mercado, dejando vacío el servicio de este modelo en la oferta aérea colombiana.De hecho, para su entrada a Colombia, JetSmart consideró en su momento la compra de alguno de esos activos en problemas —Viva o Ultra—, pero ninguna de las operaciones se concretó. Entonces, decidió entrar de cero al mercado nacional, tal como lo había hecho en Chile, Perú y Argentina.