El 2024 fue el año más caliente de todos los tiempos. Sin embargo, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) advirtió que en los próximos cinco años la temperatura alcanzará cifras todavía más altas. Si bien las implicaciones de la crisis ambiental ya se viven en todo el mundo, los ecosistemas más sensibles están enfrentando consecuencias alarmantes: los páramos, bosques tropicales y océanos son los más afectados.