Tres ceremonias para las Fuerzas Militares son motivo de orgullo nacional y el presidente de la República, como jefe de Estado, es el encargado de presidirlas. Sin embargo, este año, el presidente Gustavo Petro decidió ignorarlas. Se trata de las ceremonias de ascenso de los oficiales del Ejército, la Fuerza Aérea y la Armada Nacional.La primera se realizó en Bogotá, en la Escuela Militar, y allí los altos oficiales, los graduados y sus familias, hasta el ministro de Defensa, Iván Velásquez, debieron esperar por más de dos horas la llegada del primer mandatario.