Los protagonistas del escándalo de corrupción de la Unidad para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) están por concretar la negociación con la Fiscalía que los convirtió en testigos del caso y de paso recibir beneficios como el principio de oportunidad por algunos delitos. En otras palabras, cambiar información por restar delitos de la imputación.