Viajar por carretera es un placer para muchas personas. Esta forma de transporte, sea en carro particular o en vehículo público, es una experiencia que permite tener conexión con el entorno. Cada kilómetro recorrido muestra diferentes vistas, desde montañas, pasando por valles y hasta pequeños pueblos con encanto, que convierten el trayecto en una experiencia especial.