Finanzas Personales
¿Preparado para la vejez? Claves para construir un fondo de emergencia sólido y proteger su bienestar financiero
Laura Lesmes Díaz
10 de octubre 2025 , 08:27 a. m.
10 de octubre 2025 , 08:27 a. m.
¿Preparado para la vejez? Claves para construir un fondo de emergencia sólido y proteger su bienestar financiero
La regla 50/30/20, los CDT de corto plazo y los ajustes trimestrales son herramientas clave para fortalecer la estabilidad económica de los hogares.
Laura Lesmes Díaz
Aunque el 26 por ciento de los adultos en Colombia asegura preocuparse por tener suficiente dinero para su vejez, solo el 18 por ciento ahorra formalmente para ese momento, según el Banco Mundial. Contar con un fondo de emergencia es la primera defensa para evitar endeudamientos, proteger la estabilidad familiar y garantizar tranquilidad financiera a largo plazo.
Un fondo de emergencia funciona como un colchón financiero que permite cubrir imprevistos —como pérdida de empleo, enfermedad, reparación de vivienda o vehículo— sin recurrir a créditos costosos ni desestabilizar el presupuesto familiar.
Expertos financieros coinciden en que este ahorro debe ser una prioridad antes de pensar en invertir o planear la jubilación, ya que garantiza liquidez inmediata y autonomía ante crisis personales o económicas.
“Contar con recursos de emergencia va más allá de una buena práctica financiera; es una decisión que marca la diferencia entre atravesar una dificultad con tranquilidad o quedar atrapado en la incertidumbre”, señala un vocero de Mibanco.
Cómo construir un fondo de emergencia paso a paso
Calcule su meta de ahorro:
Determine entre tres y seis meses de gastos básicos (vivienda, transporte, alimentación, servicios, seguros, salud). Multiplique el promedio mensual por el número de meses deseado: esa será su meta inicial.
Elija el producto financiero adecuado:
El fondo debe estar en productos de alta liquidez y bajo riesgo, como cuentas de ahorro tradicionales, de alto rendimiento o CDT de corto plazo.
Mibanco, por ejemplo, ofrece CDT digitales con rendimientos competitivos, opción desmaterializada (sin riesgo de pérdida del título) y plazos desde 30 hasta 540 días, permitiendo recibir intereses periódicamente y mantener disponibilidad del capital.
Aplique la regla del 50/30/20:
Distribuya sus ingresos así:
50 % para necesidades (vivienda, alimentación, transporte)
30 % para deseos o estilo de vida
20 % para ahorro o fondo de emergencia
Si tiene deudas o ingresos variables, ajuste la fórmula priorizando el ahorro preventivo.
                    Finanzas
                    iStock
Aproveche ingresos extraordinarios:
Bonificaciones, cesantías o primas pueden acelerar la construcción del fondo sin afectar el flujo mensual. Destinar un porcentaje fijo de estos recursos a la reserva le permitirá alcanzar la meta más rápido.
Reduzca gastos no esenciales:
Identifique gastos prescindibles —suscripciones, comidas fuera de casa o compras impulsivas— y rediríjalos al fondo. Este ejercicio de autocontrol no reduce su calidad de vida, pero sí fortalece su seguridad financiera.
Revise y ajuste periódicamente:
Evalúe su fondo cada tres meses para verificar si se mantiene actualizado frente a la inflación o cambios en su estilo de vida. Si ha usado parte del ahorro, repóngalo tan pronto como sea posible.
Un pilar de estabilidad en la economía familiar
De acuerdo con Mibanco, el fortalecimiento del ahorro familiar contribuye también al equilibrio macroeconómico, ya que reduce la vulnerabilidad de los hogares ante crisis y mejora la capacidad del sistema financiero para canalizar recursos hacia proyectos productivos.
“Cuando una familia dispone de un respaldo económico, enfrenta mejor los imprevistos y gana libertad para planear su futuro con confianza”, subraya la entidad.
Además, construir un fondo de emergencia fomenta una cultura de prevención y disciplina financiera, esenciales para transitar de la preocupación por la vejez hacia la seguridad económica.
                    Finanzas.
                    iStock
Consejos finales para empezar hoy
Empiece con metas pequeñas: ahorre el equivalente a un mes de gastos y amplíe gradualmente.
Automatice el ahorro: programe transferencias automáticas a una cuenta separada cada mes.
Evite usar el fondo salvo para emergencias reales.
Revise la inflación: reajuste el monto anualmente.
Combine ahorro e inversión: una vez consolidado su fondo, explore alternativas de rentabilidad moderada.
Más noticias