Lo que comenzó como un sueño para la médica Claudia Céspedes y su familia, se terminó convirtiendo en una pesadilla y hasta en una amenaza para su integridad física y la de sus padres. Esta profesional de la salud trabajó durante décadas en extensos turnos, con el único propósito de conseguir los recursos económicos para comprar el lugar ideal para vivir con sus padres, una pareja de adultos mayores, y que no tuvieran que preocuparse por pagar arriendo.