La semana pasada, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tomó una decisión que causó un fuerte revuelo en los mercados internacionales, al implementar aranceles “recíprocos” mínimos del 10 % a todas las importaciones. Además de tasas más altas para países con los que Estados Unidos tenía déficits comerciales considerables.La imposición de estas nuevas tasas sin duda generó una reacción negativa en los mercados financieros globales.