La falta de gravedad en el espacio provoca cambios significativos en los ojos y la visión de los astronautas después de seis a doce meses a bordo de la Estación Espacial Internacional (ISS).En un estudio publicado en el IEEE Open Journal of Engineering in Medicine and Biology, el oftalmólogo de la Universidad de Montreal Santiago Costantino, descubrió que al menos el 70 % de los astronautas de la ISS han sido afectados por el síndrome neuroocular asociado a los vuelos espaciales, o SANS.