Starlink, una división tecnológica de SpaceX y propiedad del empresario Elon Musk, se fundó con el objetivo de proporcionar conexión satelital directa tanto a teléfonos móviles como a servicios de internet doméstico, beneficiando a usuarios en Estados Unidos y otros países, en colaboración con varios operadores, que tienen asociación para incorporar esta tecnología.El programa de servicio satelital, denominado Direct to Cell, comenzó a implementarse en 2024, permitiendo el envío de mensajes de texto (SMS).