Misteriosa muerte del subintendente Flower Castillo en Soacha: familia en Cartagena exige una investigación a fondo

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Misteriosa muerte del subintendente Flower Castillo en Soacha: familia en Cartagena exige una investigación a fondo

Leidys Rivero Martínez

16 de junio 2025 , 07:46 a. m.

16 de junio 2025 , 07:46 a. m.

Misteriosa muerte del subintendente Flower Castillo en Soacha: familia en Cartagena exige una investigación a fondo

El policía cartagenero fue hallado sin vida en la estación. Versión oficial habla de suicidio, su familia no cree.

Leidys Rivero Martínez

Flower Castillo Ávila creció entre los barrios Nelson Mandela y Torices, en Cartagena. En esas calles construyó su sueño de ser policía y con esfuerzo lo logró, convirtiéndose en subintendente de la Policía Nacional. Durante casi dos décadas sirvió con disciplina en diferentes regiones del país, incluyendo Bogotá, San Juan (Bolívar), Sincelejo y, desde enero pasado, en Soacha, Cundinamarca. Allí prestaba sus servicios en una estación donde también residía.

Sin embargo, el pasado miércoles 11 de junio su vida terminó de forma repentina y en circunstancias que han dejado más preguntas que respuestas. Según la versión preliminar, el uniformado de 38 años habría decidido acabar con su vida disparándose con su arma de dotación dentro de las instalaciones policiales donde trabajaba. Pero su familia, en Cartagena, no está convencida de esa versión.

No fue la Policía la que nos avisó. Fue mi cuñada quien nos llamó para contarnos lo que supuestamente pasó. Nos fuimos de inmediato para el Comando de Manga, pero allá nadie nos explicó nada. Nadie le decía a mi mamá qué había sucedido

Les pidieron calma mientras transcurre la investigación

Subintendente Flower Castillo muerto en estación de Soacha.
Cortesía

El testimonio de Carolina es desgarrador. Cuenta que una psicóloga de la institución les habló brevemente, pidiéndoles calma y paciencia mientras avanzaban las investigaciones. “Solo nos dijo que esperáramos, que supuestamente fue un suicidio, pero nosotros no creemos eso. Mi hermano no daba señales de tener pensamientos suicidas. Queremos saber qué pasó realmente”, agregó.

Carolina recuerda con claridad que habló con Flower menos de una hora antes del suceso. “Hablamos a las 2:40 p. m. y todo fue normal. Estaba tranquilo, no se despidió, no dijo nada extraño. Como siempre”, sostuvo. Según ella, el hecho ocurrió hacia las 3:30 p. m.

Además, afirma que su hermano estaba animado por un viaje próximo a Sincelejo, donde viven su esposa –también policía– y sus dos hijos. Ya había comprado tiquetes para visitarlos. “Él estaba feliz con ese viaje, quería ver a sus hijos, era su mayor alegría”, recalcó Carolina.

¿Víctima de racismos y xenofobia?

Subintendente Flower Castillo muerto en estación de Soacha.
Cortesía

La familia asegura que Flower no tenía antecedentes de depresión, pero sí les había contado de situaciones que venía enfrentando en su lugar de trabajo. Según Carolina, su hermano se sentía discriminado. “Nos decía que en esa estación todos eran bogotanos, blancos, y lo trataban mal por ser costeño y por su color de piel. Lo hacían sentir menos. Esperaba con ilusión que lo trasladaran nuevamente”, dijo.

Sobre el traslado que lo llevó a Soacha a principios de este año, Carolina también expresó incertidumbre. “Él nunca entendió por qué lo enviaron para allá. Lo sacaron de un sitio donde estaba cumpliendo bien su trabajo. Era disciplinado, estaba en el grupo de inteligencia, tenía experiencia y era responsable”, insistió.

La angustia de la familia se agrava por la falta de acompañamiento institucional. Denuncian que la Policía Nacional no les ha brindado apoyo psicológico ni información clara sobre el traslado del cuerpo del subintendente. “No sabemos en qué morgue está, ni cuándo llegará a Cartagena, ni dónde será sepultado. Nadie nos responde. Ni en el Comando local ni desde Cundinamarca”, reclamó Carolina.

Familiares inician proceso legal

Subintendente Flower Castillo muerto en estación de Soacha.
Cortesía

Frente al hermetismo de las autoridades, la familia decidió buscar apoyo legal. Han solicitado acceso al informe de balística, a la epicrisis y a fotografías del cuerpo. “Hasta el momento no nos han dejado ver nada. Sentimos que nos están ocultando información. Por eso queremos que un abogado nos represente y se aclare qué pasó realmente”, afirmó.

Este medio conoció que el caso está en manos del CTI de la Fiscalía, que asumió la investigación. Aún no se ha confirmado la fecha en que serán trasladados los restos del subintendente a su ciudad natal.

Mientras tanto, en Cartagena, sus seres queridos claman por respuestas, acompañamiento y justicia. “No vamos a descansar hasta saber qué le pasó a mi hermano. No fue un suicidio, y si alguien tuvo responsabilidad, debe responder”, concluyó Carolina, en medio del duelo que aún no ha podido comenzar por falta de certezas.

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