Dos días después del atentado sicarial contra la vida del senador por el Centro Democrático, Miguel Uribe Turbay, en la localidad de Fontibón, en Bogotá, la familia del joven político no tiene otra alternativa que aferrarse a Dios y a la ciencia desde la Fundación Santa Fe donde él recibe atención médica.Los bogotanos que han llegado hasta el lugar han acudido al Santo Rosario para pedirle a Dios que le permita a Uribe Turbay superar la cirugía a la que fue sometido, tras el ataque.